Llevo mucho tiempo este curso diciendo cosas, salidas de tono, ejemplos actuales... y no está pasando nada, ningún padre enfadado, ningún alumno cabreado... Y me está empezando a entrar el miedo. ¿Qué pasará ahora? Lo más normal es que las opiniones contradictorias, las directamente contrarias al wishfull thinking acaben molestando a alguien. Y una cosa es despertar conciencias y otra muy distinta molestar. No se me ocurriría molestar a nadie en clase, ni siquiera a los que duermen...
Hay temas que reconozco son más difíciles de tratar con tranquilidad, sine ira ac studio, como el papel de la Iglesia durante la República, la guerra civil o el régimen de Franco. Por cierto, ¿cómo es que no adelgazó él llevando 40 años de régimen? Quizás porque adelgazaran el resto de los españoles.
En fin, que vuelvo a uno de mis temas preferidos, ser neutral o no. Creo que hay temas en los que hay que ser neutral, por ejemplo, creo que los gustos musicales son un buen ejemplo. Criticar que siempre se escuche lo mismo es diferente a criticar que lo mismo sea flamenquito o hip-hop. Todo puede ser válido en ese prisma. Pero a veces, se trata, no de dar todo por bueno -neutralidad-, sino de todo lo contrario, de dar todo de vuelta y media, criticar lo criticable de todo. Es la diferencia entre el relativismo buenrollista y una postura adulta. No todo de todo es bueno. Puedes tener costumbres distintas y derecho a tener costumbres distintas, pero en todas hay cosas manfiestamente mejorables.
Esto me lleva al siguiente paso, como digo en churretes, nadie tiene la verdad al completo, pero hay quienes están completamente equivocados. El relativismo buenrollista y el posmoderno tienen en común que todo vale, que todos los modos de pensar tienen sus cosas positivas. Es algo evidente, nadie tendría un modo de pensar totalmente negativo para él y para los demás, algo de bueno deberá sacarlo. Pero ser bueno para uno y ser bueno para todos creo que es algo distinto. Por ejemplo, Nietzsche habla de la voluntad de poder y de la alegría de vivir. Hasta ahí correcto, pero esa voluntad, cuando se impone a los demás, que por eso mismo son inferiores... bueno, creo que eso es más criticable que una ética kantiana. Y por supuesto hay cosas mucho peores. El racismo, el machismo y la xenofobia creo que son peores.
Otro día hablaremos de la tolerancia, que creo que se está convirtiendo en el valor clave de una sociedad intolerante, cuando no deja de ser un simple punto de partida.
Multitud de frases nos llevan a pensar equivocadamente: "sobre gustos no hay nada escrito", ¡anda que no, libros y libros!, hay una rama entera de la filosofía, la estética. O el libro de gustos está en blanco, pero creo que hay páginas manchadas, etc. Creo que tenemos el deber de buscar la mejor de las ideas, cuando, en realidad encontramos una por casualidad y nos la quedamos. Es como si ligáramos con la primera tía de la noche sin esperar a ver la discoteque entera (la broma machista está implícita). Es mejor cambiar de ideas para mejorar que obstinarse en mantener una a toda costa simplemente porque "es mi idea".
Ese es el motivo de introducir la crítica en las clases, hacer repensar las ideas, y si te sigue gustando la tuya, enhorabuena, tienes buenas ideas. Al final resultará que cambiamos de novia o de coche antes que de cepillo de dientes o de ideas, cuando son más bararatos estos últimos.
Un saludito
martes, 3 de marzo de 2009
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4 comentarios:
hola javier, soy jose, bueno me parece que llevas mucha razón en eso de que hay que criticar todo lo criticable de cada punto de vista, pero no te desesperes si hay gente que no llega a comprender esta actitud. Por cierto la postura posmoderna no es del todo "buenrollista", no se trata de aceptar todo como válido, sino de saber de dónde viene todo y que no aparece por casualidad. bueno un saludito y sigue escribiendo. Por cierto hay una nueva entrada en m i blog échale un vistacillo.
Bueno Javier con respecto a lo que me dijiste de que no es que uno sea más malo que otro sino que tiene más poder, quiero responderte que me quedo mejor con lo que piensa Platón al respecto, que algunas veces entre una idiotez y otra dice cosas muy interesantes y es que: "los hombres más malvados salen precisamente de los poderosos. Aunque nada impide que entre éstos se encuentren hombres buenos, y, desde luego, los que lo son son dignos de gran admiración, ya que es muy duro y digno de todo elogio pasar la vida entera de manera justa teniendo plena libertad de cometer injusticia." Esto lo dice ne el Gorgias y yo lo creo también así.
Gracias por las visitillas.
Sobre Platón... Bueno, creo que el poder nunca trae nada bueno -para los demás-. You know, fight the power!
allá tú con quién te enfrentas jajajajaja.
un saludito
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